Estrenando el año en Cuyagua

El 2.008 apenas tiene seis días y ya me ha tratado de maravillas, llegué de Morrocoy solté maletas y el viernes tempranito salí para Cuyagua, como siempre regreso excesivamente feliz y es que no me canso de decirlo Cuyagua es mi playa favorita, demasiado bella, demasiada buena vibra.

En esta oportunidad iba mejor equipada porque tenía carpa nueva y un toldo grandote que le salva la patria a uno cuando se está en medio de aquel calorón y aquel solazo, todo estuvo tan pero tan bueno que el sol no estuvo tan fuerte, no habían zancudos, pegaba tanta brisa que traía goticas de mar como rocío hacia nosotros y eso que no estábamos tan pegados del mar. Como siempre uno sale de allá hecho pana de unas cuantas personas, en esta oportunidad fraternizamos con un grupo que estaba al lado de nosotros, tenían como seis carpas de las más grandes, así que puede decirse que eran un bandón y nos cuidábamos mutuamente, ellos se iban y nosotros cuidábamos su campamento, nosotros nos íbamos y ellos cuidaban el nuestro.

Estrené mi tabla de surf nuevo, tenía añales sin usar tabla así que me costó una y parte de la otra, pero finalmente esta mañana me paré por un momentico que sería quizás un minuto en la tabla y esos 60 segundos me supieron a completa gloria.

La nota mala fueron unos "pavitos" que estaban un poco más allá de nosotros y nos pusieron reggaeton a todo volumen una noche entera, les juro que los quería matar, pero bueno cada quien disfruta a su manera. Regresé con un libro en edición económica titulado Variete de Chiprut Maximiliano, su autor está haciendo un recorrido por toda América Latina y estaba en Cuyagua, así que nos habló un poco de él y yo no pude contenerme a comprarle un ejemplar, para ayudarlo en su lucha por ser uno escritor nómada y feliz en el siglo XXI (cosa para dificil) y él tuvo la cortesía de colocarme en la contraportada una pequeña pero significativa dedicatoria: "Querida Lycette, gracias por ayudarme en este sueño y espero que disfrutes del mundo Varieté. Alegría, Chiprut", tan bello él. Por cierto que me dijo que tiene un blog llamado América unida Hoy, que pueden leer haciendo click aquí, en el cual publica algunos de sus escritos, para él deseo muchos éxitos.

¿Lo mejor del viaje? Correr una olita parada otra vez en una tabla, sé que es repetitivo pero es que es una experiencia única y, por supuesto, compartir unos días en compañía de unos panas con muchas risas y siempre acompañados de una buena Guarapita cuyaguera ¡¡¡la mejor del mundo!!!.

PD: Tendré algún lector surfista que me pase el dato de algún sitio para mandar a reparar una tabla? Thanks!