Estudiantes protestan por el futuro

Todas las personas que me conozcan y en algún momento me hayan escuchado hablar de política, sabrán que siempre he sido de la opinión de que los jóvenes somos quienes tenemos en nuestras manos los procesos de cambio, porque la historia ha demostrado que siempre somos los jóvenes que con nuestra ansia natural de comernos el mundo generamos los grandes cambios en la humanidad. Es por eso que no puedo dejar de mencionar la creatividad de los estudiantes universitarios al decidir salir a marchar el día de hoy por las aceras de la ciudad de Caracas, para que nadie pueda acusarles de obstaculizar la vía pública, me parece una medida no sólo acertada sino por demás creativa, bien comentaba mi compañero de letras RomRod ayer que la mejor manera de vencer un fusil es colocándole una flor en su cañón y es así, yo particularmente considero que la mejor reacción ante esta situación que se vive en el país es que las protestas, no importa de qué bando provengan se realicen de forma realmente pacífica. Nadie puede negar el derecho que tenemos los ciudadanos a manifestar en contra de las decisiones que consideramos erradas y es por ello que elevo mi apoyo a todo aquel que considere necesario salir a la calle, eso sí de forma pacífica; ya incluso ha dado la vuelta al mundo la imagen de los jóvenes que al ver a la Guardia Nacional en una manifestación se arrodillaron en la calle y comenzaron a cantar el himno nacional, decisión que enfureció a dichos funcionarios, quienes arremetieron con bombas lacrimógenas y perdigones. Mantenganse en la lucha no armada y de resistencia pacífica que nos dejara de legado Ghandi al luchar contra el ejército británico.
Quiero además reseñar la protesta de las madres de los muchachos detenidos en San Antonio de los Altos, que al mejor estilo de las madres de la Plaza de Mayo, salieron ayer en la noche al boulevard de las minas, vestidas de blanco para simbolizar la paz y sin obstaculizar la vía pública encendieron velas en apoyo a sus hijos detenidos; es precisamente este el tipo de acciones que yo apoyo, no la lucha armada.
Finalmente me sirvo a dejarles una canción bellísima y que siempre me ha gustado por considerarla de gran inspiración, en la que casualmente se habla de jóvenes que han logrado cambios en el mundo, sin más les presento PAPÁ CUENTAME OTRA VEZ del español Ismael Serrano:

Papá cuéntame otra vez ese cuento tan bonito
de gendarmes y fascistas, y estudiantes con flequillo,
y dulce guerrilla urbana en pantalones de campana,
y canciones de los Rolling, y niñas en minifalda.
Papá cuéntame otra vez todo lo que os divertisteis
estropeando la vejez a oxidados dictadores,
y cómo cantaste Al Vent y ocupasteis la Sorbona
en aquel mayo francés en los días de vino y rosas.
Papá cuéntame otra vez esa historia tan bonita
de aquel guerrillero loco que mataron en Bolivia,
y cuyo fusil ya nadie se atrevió a tomar de nuevo,
y como desde aquel día todo parece más feo.
Papá cuéntame otra vez que tras tanta barricada
y tras tanto puño en alto y tanta sangre derramada,
al final de la partida no pudisteis hacer nada,
y bajo los adoquines no había arena de playa.
Fue muy dura la derrota: todo lo que se soñaba
se pudrió en los rincones, se cubrió de telarañas,
y ya nadie canta Al Vent, ya no hay locos ya no hay parias,
pero tiene que llover aún sigue sucia la plaza.
Queda lejos aquel mayo, queda lejos Saint Denis,
que lejos queda Jean Paul Sartre, muy lejos aquel París,
sin embargo a veces pienso que al final todo dio igual:
las ostias siguen cayendo sobre quien habla de más.
Y siguen los mismos muertos podridos de crueldad.
Ahora mueren en Bosnia los que morían en Vietnam.
Ahora mueren en Bosnia los que morían en Vietnam.
Ahora mueren en Bosnia los que morían en Vietnam.